Entre los cefalópodos que trabajamos en JUSTO LÓPEZ VALCÁRCEL, se encuentra el calamar. Estos poseen un cuerpo alargado en forma de tubo, en el que se distinguen dos aletas triangulares en su extremo superior. Es muy peculiar la concha caliza de su interior a modo de esqueleto. Para desplazarse expulsa agua a presión a través de un tubo a modo de sifón. Para camuflarse de sus enemigos posee la habilidad de adaptar su color al del entorno y, si se ve acosado, lanza un chorro de tinta negra.
Es el animal marino que más proporción de partes comestibles en todo su cuerpo posee (entre el 60 y el 80%). Se encuentra en todos los mares y océanos del mundo.
Su tinta se usa para cocinar y preparar guisos.
Esta materia prima se adapta a variadas y apetitosas preparaciones, siendo una excelente fuente de proteínas.